Parece algo lógico, pero a veces las cosas más lógicas son las que menos hacemos: en los Países Bajos, por ley, va a ser obligatorio que el 20% de los materiales de los nuevos edificios sea de madera. Conclusiones:
•El uso de hormigón será mucho menor.
•Esto generará mucha menos CO2 (no debemos explicar que la madera es más limpia que el hormigón, ¿no?)
•El precio de los edificios no subirá.
•No afectará a la resistencia de la estructura.
La novedad no viene de la utilización de la madera, sino de la obligación legal. Por supuesto, ya sabéis lo que puede suceder: si el uso de la madera subiera (si subiera mucho), el debate sobre los bosques sostenibles volvería a abrirse. Aunque la verdad es que el debate forestal nunca se ha cerrado del todo.
Pero es que ese debate ya se ha abierto: en Canadá querían construir con madera un edificio del 120 metros (30 pisos)… y se detuvo debido a que el uso de madera se consideraba excesivo. A cambio, los aeropuertos de Ottawa y Vancouver usan mucha madera.
Ahora mismo, el edificio más alto construido con madera se encuentra en Austria y se llama LifeCycle. Son 9 plantas, que parecen pocas al lado de las 30 del de Canadá.
De cualquier manera, quizá pronto empecemos a ver muchas más maderas en nuestras ciudades; en los caseríos es algo que sucede desde hace tiempo. De vez en cuando debemos aprender del pasado.