El alumnado que ha comenzado a cursar el ciclo superior de Mecatrónica industrial en Mondragon Goi Eskola Politeknikoa (MGEP) ha desarrollado el Reto 0, aplicando el Modelo Ethazi.
Diferentes fases del reto basado en la metodología ETHAZI
El objetivo del reto ha sido doble: por un lado, cada estudiante ha tenido que presentarse de forma digital a través de un vídeo CV de un máximo de 2 minutos; y por otro, ha tenido que desarrollar un mapa conceptual que recoja el proceso de aprendizaje que va a seguir durante el curso.
Presentación del reto al alumnado
A través de este reto, el alumnado ha tenido un primer contacto con la metodología basada en retos y, al mismo tiempo, ha comenzado a trabajar las competencias tanto técnicas como transversales: la creación de un vídeo Curriculum Vitae, el trabajo en equipo, la comunicación y el uso de herramientas digitales. Ha sido una forma de presentar sus propias capacidades y motivación ante una empresa real.
Desarrollo del reto 0
Además, han experimentado el trabajo en equipo a través de la dinámica «Torre de nubes» y han aprendido a hacer un seguimiento de lo aprendido a través del cuaderno del alumnado.
Desarrollo del reto 0
En este reto, hemos tenido la oportunidad de recibir la visita de la empresa SORALUCE. Estuvieron presentes la responsable de Recursos Humanos de la empresa, Amaia Berriozabal, explicando la actitud y la importancia del compromiso que se le exige hoy en día a un alumno o alumna en las empresas, y nuestro ex alumno Urko Aiartza, que actualmente ejerce como montador responsable de cabezales en Soraluce.
Amaia Berriozabal y Urko Aiartza de la empresa SORALUCE
Urko compartió su trayectoria académica y su experiencia laboral, desde el ciclo Mekatrónica hasta el puesto de responsabilidad que ocupa en la actualidad, y que ha supuesto una gran fuente de motivación para el alumnado.
Urko Aiartza ex-alumno de MGEP
Este reto ha permitido al alumnado reforzar su confianza personal y el trabajo en equipo desde el inicio del curso. Han podido observar que los retos no sólo trabajan el contenido técnico, sino que también valoran la actitud, la comunicación y las formas de trabajo. La visita de la empresa Soraluce y el testimonio de un ex alumno han dejado claro que lo aprendido y lo necesario en el mercado laboral actual están muy unidos. Así, el alumnado ha entendido desde el principio que cada paso que den durante el curso les acompañará directamente en su futura carrera profesional.
Uno de los mapas conceptuales desarrollados por el alumnado durante el reto
Este arranque sencillo pero potente ha preparado al alumnado para los retos de mayor entidad en los que van a trabajar a lo largo del curso.
Queremos dar las gracias a Amaia Berriozabal y Urko Aiartza por compartir sus vivencias y las explicaciones de la empresa Soraluce entre los alumnos. Esperamos que el próximo año vuelvan a estar entre nosotros.