Ingeniería Informática: una profesión de futuro

Desde que me propusieron escribir esta reseña en el blog, lo he intentado varias veces y, sinceramente, me resulta complicado resumir toda una vida profesional en unas líneas. Quizás pueda empezar por el final, y decir que las expectativas que tenía cuando empecé esta aventura se han cumplido con creces. Aspiraba a aprender a programar software y adquirí unos sólidos conocimientos que me han permitido desarrollarme en diferentes ámbitos de la ingeniería y de la gestión.

Iokin Azkue, Technical Director  Control & Multimedia Systems CAF Power & Automation

No deja de ser una aventura la elección de tu futuro profesional con 17-18 años. A esa edad todavía no tenemos suficiente experiencia ni conocimientos como para estar seguros de una decisión tan vital que nos ayude a encaminar nuestro futuro. El ámbito profesional es algo que vislumbramos en la lejanía y, realmente, no sabemos muy bien las consecuencias de tomar un camino u otro. En resumidas cuentas, tenemos muchas incertidumbres para tomar una decisión que nos va a condicionar todo nuestro futuro.

A pesar de todo, en mi caso concreto, lo tuve claro desde un principio. Fue como un amor a primera vista. Mis primeros contactos con el mundo de los ordenadores me fascinaron. Aquello de escribir un texto y que la máquina fuese capaz de responder a preguntas, era increíble. Todo esto, en los principios de la informática, con pantallas minúsculas, texto en verde, disquetes, etc. A partir de ahí y a medida que la tecnología fue evolucionando cada vez estaba más enganchado. Encontré mi vocación y quería dedicarme a ello profesionalmente. La aventura profesional se había puesto en marcha.

A partir de ahí, empezó el proceso de elección de Universidad, y también lo tuve claro. La posibilidad que me ofrecía MU (en aquella época Eskola Politeknikoa) de combinar estudio con trabajo, de enfocar los estudios de una manera muy práctica, las posibilidades de estudiar en universidades extranjeras de prestigio y las opciones profesionales al finalizar la carrera, me hizo decantarme muy rápido hacia Mondragón.

Mis estudios se desarrollaron en dos etapas. Una primera en Arrasate y una segunda en la EPFL (Ecole Polytechnique Fédéral de Lausanne),en Suiza. Salí con una visión muy general de lo que era la informática en todos sus aspectos: desde la programación de equipos electrónicos, dentro del mundo del software embebido, hasta la gestión de los sistemas de información. Esta visión amplia es la que me ha permitido ejercer diversas funciones dentro de las diferentes organizaciones en las que he trabajado.

En mis inicios, en ULMA Handling, me dediqué a desarrollar software para aplicaciones de control. Obtuve una experiencia muy interesante en un tipo de software más cercano a la máquina y con necesidades de respuesta rápida. En una segunda etapa, desarrollada en Solmicro, opté por los sistemas de gestión, o ERPs. En esta etapa, más amplia que la primera, tuve la oportunidad de conocer muchas empresas y muy diferentes, así como sus estilos y diferentes casuísticas: industriales, de servicios, comerciales, etc. Cuando se pone en marcha un ERP es necesario conocer en detalle el funcionamiento de las empresas y ofrecer soluciones que cubran huecos existentes en los procesos de la organización o, simplemente, los mejoren. Ello obliga a conocer cada organización en detalle lo que me permitió adquirir una experiencia muy interesante en diferentes ámbitos organizativos.

La tercera etapa está más orientada a la gestión. La experiencia anterior me ha permitido poder optar a funciones de gestión aportando mi experiencia previa de las diferentes empresas que he conocido. La informática me ha permitido estar cerca de los problemas reales de muchas empresas, conocer los funcionamientos básicos de las diferentes organizaciones y tener una visión general de sus necesidades en muchos ámbitos.

Hoy en día ejerzo las funciones de Director Técnico de Sistemas de Control y Multimedia en CAF P&A. Desarrollamos mucho hardware (HW) pero también mucho software (SW). En nuestro sector el SW cada vez aporta un mayor valor añadido. Las aplicaciones informáticas permiten la polivalencia del HW, haciendo que una misma tarjeta electrónica se pueda adaptar a diferentes soluciones y funcionalidades. Los sistemas de información cada vez son más importantes para tratar grandes volúmenes de datos y ofrecer información para toma de decisiones rápidas. En muchos sistemas el único interfaz del sistema con el usuario es una aplicación informática. En estos casos el aspecto gráfico, la ergonomía para el usuario, la facilidad de uso, etc. son aspectos fundamentales para poder vender soluciones de mucho valor añadido.

Todos estos ejemplos y muchos más reflejan la necesidad de disponer de ingenieros informáticos en las empresas de hoy en día en todas sus facetas. La visión de la gestión de la información es básica en muchos aspectos de nuestras organizaciones, no sólo en el de gestión, también es muy importante el diseñar las pantallas adecuadas o el ser capaz de desarrollar aplicaciones en tiempo real con requisitos de respuestas muy exigentes. En definitiva, los ámbitos que requieren aplicaciones informáticas en toda su extensión, desde sistemas embebidos hasta grandes sistemas de información, es tan amplio y está creciendo tanto, que siempre existirá la necesidad de incorporar ingenieros informáticos en nuestras organizaciones.