El reto de la electromovilidad y el transporte sostenible
Electromovilidad ha sido una de las candidatas para ser nominada por la Fundación del Español Urgente (Fundéu BBVA) como la palabra del año 2019. Y no es para menos, ya que el concepto de electromovilidad define la revolución tecnológica que va a facilitar un transporte más sostenible. Al tratarse de un reto social y tecnológico de primer orden, Mondragon Unibertsitatea ha hecho una firme apuesta por ella.
El profesor e investigador de Mondragon Unibertsitatea José María Canales, entrevistado por MU Telebista, explica en qué ámbitos está trabajando la universidad, en colaboración con otros agentes, con el fin de aportar conocimiento y tecnología al desarrollo de la electromovilidad.
Canales explica que “últimamente estamos observando en nuestro entorno un boom en cuanto a vehículos eléctricos ligeros, como son las bicicletas eléctricas, patinetes….y aunque el vehículo eléctrico todavía no ha acabado de explotar en los términos que se preveía en un principio, sí que ha empezado a hacerlo en este ámbito urbano. Esta explosión traerá nuevas oportunidades, tanto a nivel tecnológico como de modelos de negocio”.
Nuevos modelos de negocio
Estos nuevos modelos de negocio y estas nuevas tecnologías, según señala Canales, van a requerir nuevos tipos de perfiles de ingeniería orientados a la electromovilidad. “Estamos hablando de electrónica, de almacenamiento, de informática, organización, y de estructuración a nivel de las empresas, ya que se va a precisar un cambio de modelo y de chip ”, explica el profesor e investigador, que viene trabajando en proyectos de electromovilidad desde el año 2000.
Los primeros vehículos eléctricos, desarrollados en el siglo XX, explica en la entrevista, estaban diseñados con baterías de plomo y tenían una autonomía muy limitada, ya que apenas llegaban a 50 km. “Y, a partir del 2010, ha sido cuando ha empezado el desarrollo de vehículos eléctricos con tecnología litio, lo que ha permitido aumentar la autonomía, de estos 50 km. iniciales, hasta unos 300 kilómetros”, indica Canales. “Este avance, junto con otros desarrollos como internet y la telefonía móvil, está dando lugar a nuevos negocios como el alquiler y el préstamo de vehículos eléctricos, o a proyectos de tracción urbana, como los autobuses eléctricos”.
Gipuzkoa, referencia en el sur de Europa
De forma paralela, la Administración está potenciando desde la Unión Europea políticas medioambientales de reducción de emisiones de CO2, las que van a obligar a restringir o eliminar la circulación de vehículos de combustión interna de dentro de las ciudades, como ya está ocurriendo, por ejemplo, en Londres y París.
En Euskadi, según apunta Canales, existe un gran potencial para desarrollar proyectos de electromovilidad, ya que hay muchas empresas de automoción y también empresas que se dedican al sector de las redes eléctricas. Gipuzkoa, en concreto, es un centro de referencia al sur de Europa en temas de electromovilidad. “Tenemos empresas punteras en este sector, como CAF en el sector de trenes eléctricos y autobuses eléctricos; Irizar que fabrica autobuses de combustión interna y autobuses eléctricos; u Orona que se dedica al transporte de personas dentro de los edificios”, enumera José María Canales. “Y desde Gipuzkoa, el Gobierno Vasco está ayudando a todas estas empresas a llevar a cabo sus proyectos”, añade.
Mondragon Unibertsitatea, dentro de la línea de energía eléctrica, está investigando y colaborando en diferentes proyectos con empresas del entorno. “Principalmente colaboramos en temas de electromovilidad con CAF, Siemens Gamesa, Ingeteam y Ormazabal”, señala.
“Dentro de la apuesta de Mondragon Unibertsitatea por la electromovilidad, asimismo, estamos acompañando al Gobierno Vasco y a la Diputación de Gipuzkoa y, dentro de este reto, estamos capacitando nuevos y nuevas profesionales en este sector.
La universidad, incluso, está impulsando el desarrollo de proyectos propios en el campo de la electromovilidad. “Existe una spin off que está trabajando en el desarrollo de una bicicleta eléctrica que no necesita cargador de batería, porque es el propio persona usuaria la que va a ir recargando la batería de la bici”, prosigue.
Grados y másteres para capacitar nuevos profesionales
Desde el punto de vista académico en Mondragon Unibertsitatea existen los grados de:
Y los másteres universitarios en:
Máster dirigido a profesionales:
Todas estas titulaciones están orientadas a capacitar profesionales que van a tener conocimientos suficientes para abordar con garantías los retos tecnológicos en electromovilidad.
El alumnado de estas titulaciones participan, bien como becarios o en sus proyectos fin de grado máster, en proyectos de investigación con las empresas anteriormente mencionadas. En el caso de los Trabajos Fin de Grado, en el curso académico 2018-2019, el premio al mejor proyecto fin de carrera en euskera fue para Markel Azkue Etxeandia. Realizó el trabajo en Ikerlan, en el ámbito de la electromovilidad.
Además, una vez que finalizan sus estudios, se van incorporando a este tejido industrial con unos conocimientos muy profundos en temas de electromovilidad. Muestra de ello es la jornada sobre sistemas de almacenamiento basados en baterías donde expertos y expertas de diferentes ámbitos expondrán los avances y las retos estratégicos a los que se enfrentan que tendrá lugar el 16 de enero en el campus Orona Ideo o el doctorado realizado por Egoitz Martinez sobre aplicaciones de electromovilidad.
La electromovilidad, el transporte sostenible y las energías renovables en general siempre me han aprecido una rama fascinante. Simplemente es el futuro, ojalá en lugar de poner muros nuestros políticos apuesten por este tipo de energías. Como bien se indica en el artículo además de como fuente de energía limpia generaran nuevos empleos y modelos de negocio digitales.